28 de enero de 2025

MURALLA COSTERA DE CÁDIZ CON SUS BALUARTES 2025

En 2017, cuando escribí el primer post dedicado a la Muralla Costera de Cádiz, establecí que, al margen de los dos castillos, esta tiene 15 elementos defensivos, sin contar los 5 desaparecidos del Frente Portuario y los 2 del Frente del Vendaval. Esos números estaban sacados de un mapa que consulté en la página de la Asociación Española de Amigos de los Castillos.

Ahora, en este nuevo artículo voy a precisar bastante los datos mencionados, partiendo de la información más detallada que he encontrado, tanto en el blog de Rafael Lara, denominado Fuertes, Castillos y Fortalezas, como en un capítulo, escrito por Pilar Chías Navarro y por Tomás Abad Balboa, que se titula La Bahía de Cádiz: Territorio Fortificado y Paisaje, y que está incluido en el libro El Patrimonio Fortificado: Cádiz y el Caribe, una Relación Transatlántica.

Después de cotejar la información de esas fuentes, he visto que las tres coinciden en lo básico, pero que presentan divergencias. Por ello, de cara a escribir este post, he tomado yo algunas decisiones sobre qué datos adoptar como válidos. 

La primera diferencia entre las fuentes viene dada por el hecho de que la Muralla Costera de Cádiz se puede dividir en cuatro frentes o en cinco. En cuatro de esos frentes coinciden todos (son el Frente de Tierra, el Frente Portuario o Frente de la Bahía, el Frente del Sur o Frente del Vendaval y el Frente de Poniente). Lo que pasa es que Rafael Lara desgaja el llamado Frente de la Caleta del Frente de Poniente. A mí, esta opción me parece la más lógica. 

Partiendo de esa base, hay consenso en que el Frente de Tierra está compuesto por el Baluarte de Puertas de Tierra, que se conoce como Puertas de Tierra a secas, así como por el Baluarte de Santa Elena y el Baluarte de San Roque.

Más conflictivo es el Frente Portuario o Frente de la Bahía, y no porque haya desaparecido en gran parte, sino porque hay una cierta divergencia con respecto a dónde acaba. Yo, con la versión que me quedo es con la que dice que el frente empezaba en la Batería de las Cañas, que pasó a ser Baluarte de Santiago en 1775, y que aún se conserva. Después, delante de lo que era la alhóndiga (que luego pasó a ser la fábrica de tabacos, y en cuyo solar, hoy día, se ubica el Palacio de Congresos de Cádiz) estaba el Baluarte de los Negros. A continuación, se encontraban la Puerta de la Mar, la Batería de la Cruz, la Puerta de Sevilla y el Baluarte de San Antonio. Estos son los cinco elementos que hablaba arriba que desaparecieron en el Frente Portuario. Todos se eliminaron al hacer el Puerto de Cádiz

Más allá, en la Muralla están el Baluarte de San Felipe y el de San Carlos (aunque ambos parecen haberse unido a posteriori, de manera que el de San Carlos ya no sobresale), la Batería de San Francisco o de la Escalerilla, el Baluarte de la Candelaria, el Baluarte de la Soledad o de la Bomba, y, por último, el Baluarte del Bonete. Mi opinión es que todos estos elementos conforman el Frente de Poniente.

A partir de ahí, empezaría el Frente de la Caleta, que estaría integrado por la Batería de San Pedro, la Batería de San Pablo, la Puerta de la Caleta y el Baluarte del Orejón. También estarían en este frente el Castillo de Santa Catalina y el Castillo de San Sebastián.

Por último, el Frente del Vendaval incluiría el Baluarte de los Mártires, el Baluarte de Capuchinos, la Plataforma de San Rafael y de San Miguel, así como los desaparecidos Baluarte de San Nicolás y Baluarte del Matadero.

Por tanto, al final he establecido 17 elementos que se conservan (dos más que los que se marcaban en el mapa de la Asociación Española de Amigos de los Castillos), además de los 7 que se han eliminado y de los 2 castillos. Con respecto a estos últimos, en el post de 2017 hablé del Castillo de Santa Catalina, y ahora voy a narrar la visita que hice el otro día al Castillo de San Sebastián.


Tuve suerte, porque Castillo de San Sebastián se reabrió el pasado 12 de agosto, después de 6 años cerrado, y no está muy claro que vaya a ser visitable de manera indefinida. De momento, el jueves nosotros pudimos acceder a él sin pagar nada.

El Castillo de San Sebastián no pasa desapercibido en cualquier imagen área o mapa de Cádiz que se mire, porque está en medio del mar, separado de la ciudad, pero se ha unido a ella mediante un estrecho espigón artificial de 500 metros de longitud, que acaba marcando la fisonomía del casco histórico gaditano. 



Para acceder al malecón del Castillo de San Sebastián, en tierra firme hay que atravesar dos arcos, que forman la Puerta de la Caleta. Esta data de 1748, y no solo conecta el barrio de La Viña con el paseo que lleva al Castillo, sino que también permite alcanzar el lado sur de la Playa de la Caleta. El primer arco está encalado, y tiene un aspecto indiano. El segundo es de piedra, y se encuentra alineado con la Muralla.


En el espacio que hay entre los dos arcos, en su día se habilitó un barracón, destinado a dar cobijo a la primera avanzadilla de la guardia del Castillo. En la actualidad, en esa escondida edificación se ubica la Peña Flamenca Juanito Villar.

Al otro lado del espigón, es donde se encuentra el Castillo de San Sebastián. La fortaleza se asienta en la Isla de San Sebastián, que está conformada realmente por dos islotes, los cuales se hallan muy juntos. El más cercano a Cádiz fue el primero en fortificarse, en el año 1706.


Esa parte original del Castillo ocupó toda la superficie del pequeño islote, de manera que los muros de la fortaleza dan directamente al mar, formando un polígono de nueve lados. En cinco de las esquinas se construyeron garitas, dos de planta hexagonal, flanqueando la puerta de acceso, y otras tres de planta circular.


Actualmente, esa puerta de entrada al Castillo de San Sebastián desde el malecón se denomina Puerta de la Ciudad.


Al atravesarla, se accede al Patio de Armas de la parte más antigua del Castillo, alrededor del cual se construyeron almacenes, un polvorín y una capilla, así como estancias para los militares.


Y es en este punto, en el que hay que decir que, lo que se consideró, en origen, como Castillo de San Sebastián, acababa ahí, pero que, en 1860, se amplió la fortificación, edificándose la Avanzada de Santa Isabel. Esta ocupó toda la superficie del otro islote que había a continuación del primero, que era bastante más extenso. En él, se había construido una ermita en 1457, y luego una torre atalaya en 1613, que en 1766 había sido reconvertida en faro.
 En el siguiente croquis, que está elaborado por Rafael Lara, y que se incluye en un post de su blog, se ve a la perfección como quedó la estructura completa del Castillo de San Sebastián, cuando este se agrandó.


Como se puede ver en el plano, el Castillo de San Sebastián propiamente dicho es solo la fortaleza que se edificó en el islote pequeño. La del grande es la que se denominó Avanzada de Santa Isabel. Hoy día, sin embargo, se considera que todo es el Castillo de San Sebastián. La puerta que se abrió, para comunicar las dos partes de la fortificación, se llama Puerta de la Avanzada.


Desde el lado de la Avanzada de Santa Isabel, se ve mejor como la Puerta de la Avanzada ejerce de apertura occidental del bastión fortificado que se construyó originalmente en la Isla de San Sebastián


En mi opinión, el Patio de Armas del sector antiguo del Castillo no llama demasiado la atención. Este ha quedado como una especie de zona de paso, ya que la mayoría de las construcciones que tiene adosadas a los muros parecen estar sin rehabilitar, y las que se han remodelado no se encontraban abiertas a las visitas. Por otro lado, las vallas rojas que han puesto, para proteger los laterales a los cuales no quieren que la gente se acerque, desentonan una barbaridad. Incluso, desde el cielo se puede ver como la parte primigenia de la fortaleza se ha habilitado como un simple pasillo de acceso a la Avanzada.


La Avanzada, por su parte, aunque también tiene murallas, es un espacio mucho más amplio y diáfano, en el que no hay tantas construcciones. En ella, tampoco hay demasiados elementos que ver. En realidad, el interés del Castillo de San Sebastián reside en lo bien conservada que está la estructura. Lo de dentro es menos interesante. 

De todas formas, sí me pareció curiosa la base de la antigua torre atalaya, que luego se convirtió en faro. En la siguiente foto, dicha base es el círculo de piedra que está a la izquierda.


Esa estructura cilíndrica de 10 metros de alto, es lo que queda del faro primitivo, que fue demolido en 1898, para evitar que fuera usado como referencia por los artilleros de los barcos de EEUU, país que en ese momento estaba en guerra con España. En su lugar, en 1913 se inauguró el Faro actual, que se solo usa con fines civiles.


Cabe destacar, que el actual del Castillo de San Sebastián fue el segundo faro eléctrico erigido en España y el primero de estructura metálica. Mide 41 metros. Junto a él, hay un montículo con una construcción, que estaba cerrada, y que no he conseguido averiguar para qué se usa o se usó.



Rodeando todo el recinto, hay una serie de edificaciones de una planta, a cuyos tejados se puede subir por unas grandes rampas. 


En una de esas construcciones estaban habilitados unos baños que me salvaron la vida, pero la mayoría las vi cerradas o abandonadas. Sin embargo, como se puede acceder a su parte superior, los inmuebles ejercen de adarve. Este bordea los muros de la Avanzada por dentro, y permite ver el mar desde lo alto. 

Por lo demás, en el Castillo de San Sebastián no hay mucho más. No obstante, es pertinente destacar que la fortaleza es Lugar de Memoria Histórica de Andalucía. La razón la he sabido después. Por lo visto, el 17 de julio de 1936, cuando Franco y los suyos dieron el golpe de estado que provocó la Guerra Civil, las autoridades fieles a la legalidad se refugiaron en la sede del Gobierno Civil, y resistieron 48 horas. El 19, todos los leales al orden establecido fueron detenidos, y los que eran militares fueron conducidos al Castillo de San Sebastián, donde se les condenó a muerte. El 6 de agosto, fueron ejecutados allí mismo el comandante Mariano Zapico, el teniente coronel Leoncio Jaso, el capitán Antonio Yáñez-Barnuevo y el oficial Luis Parrilla. Por desgracia, no fueron los últimos en ser fusilados en ese sitio. Es impactante.

El caso es que nosotros, tras recorrer aquello con calma, salimos y aprovechamos que es posible bajar del malecón, si la marea lo permite, y que se puede caminar por la base de roca sobre la que está construida el Castillo, contemplándolo desde otras perspectivas.



Precisamente, gracias a que se puede descender del malecón por varios puntos, nosotros, antes de atravesar de nuevo la Puerta de la Caleta, bajamos también a la Playa de la Caleta. Hacía una tarde invernal maravillosa.


María y yo nos tumbamos en la arena, y nos quedamos cuajados. Me encanta dormir la siesta en la playa, en días así. Tras el breve receso, abandonamos el entorno del Castillo de San Sebastián, habiéndolo explorado bastante bien.

Con esto, ya he hablado en este blog de los dos castillos que están insertos en la Muralla Costera de Cádiz, así como de la Puerta de la Caleta. En 2017, también dije que conozco el Baluarte de los Mártires, desde que entré en él en los años 2003 y 2012, pero me quedaría hablar de los otros 14 elementos defensivos que se conservan. Cuando los visite, haré igualmente mención a los 7 que han desaparecido.


Reto Viajero MARAVILLAS DE ANDALUCÍA
Visitada MURALLA COSTERA DE CÁDIZ CON SUS BALUARTES.
En 2003 (primera visita), % de Maravillas de Andalucía visitadas en la Provincia de Cádiz: 33'3% (hoy día 66'7%).
En 2003 (primera visita), % de Maravillas de Andalucía visitadas: 13'2% (hoy día 40'5%).


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