El pasado fin de semana quedó confirmado que la maldición que me perseguía en las medias maratones de la provincia de Huelva ha quedado atrás. En total, con la del domingo he corrido en mi vida 36 medias y si hiciera un ranking de las cinco más desastrosas, estarían sin duda en él las tres que corrí en la citada provincia entre 2006 y 2011 (dos en Palos de la Frontera y una en Valverde del Camino).
Durante un tiempo me dio por pensar que la marca del primer medio maratón de Palos que disputé (1h38:32) iba a pasar a la posteridad como mi mejor registro en Huelva. En enero de 2012, sin embargo, surgió la posibilidad de ir a correr el Medio Maratón Ciudad de Ayamonte con un amigo y decidí intentar de nuevo disputar 21.097 metros decentes en suelo onubense. Ese día, a la cuarta fue la vencida, la cosa salió bien. El tiempo tampoco mejoró tanto (marqué 1h34:01), pero lo importante fue que pude disfrutar de la carrera en condiciones: lo di todo, como siempre, pero controlé bien la distribución estable de las fuerzas a lo largo de los 21 kilómetros y no hubo hundimientos ni desastres.
Aquella mañana me volví a casa con buen sabor de boca, porque la organización de la carrera fue modélica y porque el recorrido de esta resultó ser del estilo de los que más me gustan: recto, abierto y llano (tras dar una vuelta por Ayamonte la carrera fue hasta Isla Canela y volvió).
Hace un par de semanas, tras no haber corrido ninguna carrera desde el 20 de noviembre, viendo que se acerca el Maratón de Sevilla y que tenía un mono tremendo de competir un poco, pero que este año no quiero correr carreras en el último mes antes de la gran cita, busqué una prueba interesante y motivante, y ante la imposibilidad de conseguir ya un dorsal para el Cross de Itálica, se me ocurrió volver a Ayamonte.
Como he dicho, en 2012 fui a la carrera acompañado de un amigo, pero en esta ocasión he ido solo. También ha sido totalmente distinto el clima: hace cinco años llovía (corriendo me mojé bastante), pero el frío era menos crudo. El domingo, por contra, el cielo amaneció azul y sin una nube, pero la temperatura era heladora.
La tercera diferencia entre las dos ediciones ha sido el recorrido: ya no se llega corriendo hasta Isla Canela, el trazado de la carrera va hacia allí al principio, pero antes de llegar se realiza un giro de 180º en una rotonda y se enfila de nuevo Ayamonte. En cambio, se dan dos vueltas a un circuito que recorre parte del pueblo. Escuché a gente que estaba contenta con las novedades, es cierto que en todo el largo tramo que discurría hasta Isla Canela no se veía ni a una sola persona en las aceras, mientras que ahora, al dar dos vueltas por Ayamonte, hay mucho más público animando. No obstante, a mi me molaba más el otro recorrido, pero es solo cuestión de gustos. La pena es que el trayecto que se hace por el casco urbano de Ayamonte también ha cambiado. En efecto, en 2012, al estar previsto un solo un paso, la carrera atravesaba el corazón de la población y recorría entera la calle Muelle de Portugal, que discurre paralela al Río Guadiana y hace de frontera entre este y el centro histórico. El domingo, por contra, recorrimos algunas partes del pueblo, pero nos movimos fundamentalmente por una zona periférica de la población.
Lo que sí que no ha cambiado es la ubicación de la meta dentro del Estadio Blas Infante. Acabar dando una vuelta por el tartán de una pista de atletismo me encanta y supone un aliciente extra para cualquier carrera.
La organización del evento siguió siendo modélica, el recorrido estuvo bien señalizado y perfectamente medido, y el avituallamiento fue muy completo.
Con respecto a mi carrera, la verdad es que mi idea era bajar de 1h34, en 2012 me sobró solo un segundo y me dio un poco de coraje. Calculé que tenía que ir a 4:27 el kilómetro y lo vi factible, dado mi estado actual de forma, así que salí con esa intención. La buena noticia es que hice 17 de los 21 kilómetros a un ritmo que se mantuvo entre 4:22 y 4:33 el kilómetro, es decir, que fui relativamente estable. Además, corrí francamente cómodo hasta el kilómetro 12 o 13. Luego tuve un par de kilómetros de transición y al final tuve que acabar apretando los dientes para mantenerme en el objetivo, pero el hecho de lograrlo me llenó de satisfacción, aunque, eso sí, lo conseguí por los pelos: marqué 1h33:55 (puesto 144 de 354 participantes).
Ahora lo siguiente es el Maratón de Sevilla, que es harina de otro costal. No creo que corra carreras hasta entonces, aunque entrenamientos duros me quedan unos cuantos. Espero llegar lo mejor posible, seguro que en febrero viviré otro gran día.
Reto Atlético 1.002 CARRERAS
Carreras completadas: 193.
% del Total de Carreras a completar: 19'2%.
Reto Atlético 102 MEDIAS
Medias Maratones completadas: 36.
% del Total de Medias Maratones a completar: 35'2%.
Reto MEDIAS DE ESPAÑA Y PORTUGAL
Completado Media Maratón en la PROVINCIA DE HUELVA.
En 2006 (año de la primera Media corrida en la Provincia de Huelva), % de Provincias en las que había corrido una Media: 11'3% (hoy día 24'5%).
Durante un tiempo me dio por pensar que la marca del primer medio maratón de Palos que disputé (1h38:32) iba a pasar a la posteridad como mi mejor registro en Huelva. En enero de 2012, sin embargo, surgió la posibilidad de ir a correr el Medio Maratón Ciudad de Ayamonte con un amigo y decidí intentar de nuevo disputar 21.097 metros decentes en suelo onubense. Ese día, a la cuarta fue la vencida, la cosa salió bien. El tiempo tampoco mejoró tanto (marqué 1h34:01), pero lo importante fue que pude disfrutar de la carrera en condiciones: lo di todo, como siempre, pero controlé bien la distribución estable de las fuerzas a lo largo de los 21 kilómetros y no hubo hundimientos ni desastres.
Aquella mañana me volví a casa con buen sabor de boca, porque la organización de la carrera fue modélica y porque el recorrido de esta resultó ser del estilo de los que más me gustan: recto, abierto y llano (tras dar una vuelta por Ayamonte la carrera fue hasta Isla Canela y volvió).
Hace un par de semanas, tras no haber corrido ninguna carrera desde el 20 de noviembre, viendo que se acerca el Maratón de Sevilla y que tenía un mono tremendo de competir un poco, pero que este año no quiero correr carreras en el último mes antes de la gran cita, busqué una prueba interesante y motivante, y ante la imposibilidad de conseguir ya un dorsal para el Cross de Itálica, se me ocurrió volver a Ayamonte.
Como he dicho, en 2012 fui a la carrera acompañado de un amigo, pero en esta ocasión he ido solo. También ha sido totalmente distinto el clima: hace cinco años llovía (corriendo me mojé bastante), pero el frío era menos crudo. El domingo, por contra, el cielo amaneció azul y sin una nube, pero la temperatura era heladora.
La tercera diferencia entre las dos ediciones ha sido el recorrido: ya no se llega corriendo hasta Isla Canela, el trazado de la carrera va hacia allí al principio, pero antes de llegar se realiza un giro de 180º en una rotonda y se enfila de nuevo Ayamonte. En cambio, se dan dos vueltas a un circuito que recorre parte del pueblo. Escuché a gente que estaba contenta con las novedades, es cierto que en todo el largo tramo que discurría hasta Isla Canela no se veía ni a una sola persona en las aceras, mientras que ahora, al dar dos vueltas por Ayamonte, hay mucho más público animando. No obstante, a mi me molaba más el otro recorrido, pero es solo cuestión de gustos. La pena es que el trayecto que se hace por el casco urbano de Ayamonte también ha cambiado. En efecto, en 2012, al estar previsto un solo un paso, la carrera atravesaba el corazón de la población y recorría entera la calle Muelle de Portugal, que discurre paralela al Río Guadiana y hace de frontera entre este y el centro histórico. El domingo, por contra, recorrimos algunas partes del pueblo, pero nos movimos fundamentalmente por una zona periférica de la población.
Lo que sí que no ha cambiado es la ubicación de la meta dentro del Estadio Blas Infante. Acabar dando una vuelta por el tartán de una pista de atletismo me encanta y supone un aliciente extra para cualquier carrera.
La organización del evento siguió siendo modélica, el recorrido estuvo bien señalizado y perfectamente medido, y el avituallamiento fue muy completo.
Con respecto a mi carrera, la verdad es que mi idea era bajar de 1h34, en 2012 me sobró solo un segundo y me dio un poco de coraje. Calculé que tenía que ir a 4:27 el kilómetro y lo vi factible, dado mi estado actual de forma, así que salí con esa intención. La buena noticia es que hice 17 de los 21 kilómetros a un ritmo que se mantuvo entre 4:22 y 4:33 el kilómetro, es decir, que fui relativamente estable. Además, corrí francamente cómodo hasta el kilómetro 12 o 13. Luego tuve un par de kilómetros de transición y al final tuve que acabar apretando los dientes para mantenerme en el objetivo, pero el hecho de lograrlo me llenó de satisfacción, aunque, eso sí, lo conseguí por los pelos: marqué 1h33:55 (puesto 144 de 354 participantes).
Ahora lo siguiente es el Maratón de Sevilla, que es harina de otro costal. No creo que corra carreras hasta entonces, aunque entrenamientos duros me quedan unos cuantos. Espero llegar lo mejor posible, seguro que en febrero viviré otro gran día.
Reto Atlético 1.002 CARRERAS
Carreras completadas: 193.
% del Total de Carreras a completar: 19'2%.
Reto Atlético 102 MEDIAS
Medias Maratones completadas: 36.
% del Total de Medias Maratones a completar: 35'2%.
Reto MEDIAS DE ESPAÑA Y PORTUGAL
Completado Media Maratón en la PROVINCIA DE HUELVA.
En 2006 (año de la primera Media corrida en la Provincia de Huelva), % de Provincias en las que había corrido una Media: 11'3% (hoy día 24'5%).
